domingo, 6 de noviembre de 2011

Type O Negative (1 de 2).


La mayor parte de las bandas son tres, cuatro o cinco personas que se reunen para escribir letras, componer canciones e interpretarlas hacia el público. Fin de la historia. Pero algunas bandas tratan de ser algo más. Hay bandas que se ríen o hacen referencia al hecho de ser ellas mismas una banda, un poco a la manera de los programas televisivos en que el protagonista de pronto cobra conciencia de ser un personaje y rompe la cuarta muralla mirando a la cámara para soltarle un comentario al público. La música pasa un poco a segundo plano, en relación a la puesta en escena, o a los chistes metatextuales que dejen caer. La calidad de la música puede resentirse un poco en el proceso, pero eso es lo de menos porque el punto está en otra parte. Por descontado que Type O Negative son uno de ellos. A lo largo de su evolución...

...desde una banda más cercana al Hardcore o al Thrash para pasar después a ser uno de los pilares del Gothic Metal, para rematar en un estilo entre blacksabático y punkie, todos esos cambios en realidad son productos de una determinada actitud ante la vida y el mundo que está llena de ironía y mala leche. Varios de sus discos, de hecho, no son sólo colecciones de canciones, sino obras integrales como un todo, gracias a interludios de distinto tipo.


Como muchas otras bandas, Type O Negative partió como evolución de proyectos musicales anteriores. En fecha tan temprana como 1976, surgió una banda llamada Northern Lights, en la cual unieron fuerzas por primera vez Peter Steele y Josh Silver, más otras dos personas que no seguirían después a Type O Negative. Northern Lights derivó en Fallout, que sólo grabó un single para la escena Heavy Metal de comienzos de los 80s. Josh Silver derivó después hacia Original Sin, que trataba de acoplarse a la moda del Hair Metal y de la New Wave, mientras que Peter Steele formó una banda thrash llamada Carnivore, de la cual nadie se acordaría de no ser porque Steele estuvo allí. Y ya que estamos: el nombre del vocalista Peter Steele, cuyo apellido hace tanto juego con su enorme presencia y su profunda voz, debe ser alguna otra clase de broma, ya que nació como Peter Thomas Ratajczyk.


El proyecto Carnivore alcanzó a sacar un par de álbumes que pasaron sin pena ni gloria. Peter Steele unió entonces fuerzas con el baterista Sal Abruscato, y con Kenny Hickey, y se reformularon, ahora sí, como Type O Negative. En 1991 sacaron su primer disco, que fue "Slow, Deep and Hard". En el disco mostraron claramente que tenían una idea del sonido que querían conseguir, pero no cómo lograrlo. No ayudó que mucho del material del disco en realidad fuera música que Peter Steele había escrito y nunca grabado para Carnivore, y que fue traído y reformateado para el disco debut de Type O Negative. Con todo, el con típico humor retorcido de Type O Negative, el tema "The Missinterpretation of Silence and its Disastrous Consequences" consiguió abrirse camino hasta su disco de grandes éxitos, lo que no está nada mal para un tema que es... un minuto y cuatro segundos de silencio absoluto. Para el registro ha quedado que la carátula de "Slow, Deep and Hard" es en realidad una imagen altamente procesada de... una penetración vaginal.


"Slow, Deep and Hard" fue seguido por "The Origin of the Feces", que es una especie de broma sobre el disco anterior, reestructurando varios temas del mismo. La historia es digna del resto de Type O Negative. El sello de turno les impuso como obligación contractual el grabar un disco en vivo. Como a la banda no le apetecía hacerlo, simplemente tomaron el dinero para la grabación, compraron vodka barato con él, luego se encerraron en un sótano para regrabar buena parte del disco anterior, y le añadieron efectos de sonido de multitudes para hacerlo "en vivo". Lo que debe ser alguna clase de comentario sarcástico sobre el fetichismo que impera en el mundo de los fanáticos musicales acerca de los discos en vivo. Comenzó también la tradición de hacer covers de canciones anteriores, de una estilizada manera gótica, en este caso con "Hey Pete" (cover con nuevas letras de "Hey Joe" de Jimmi Hendrix), y "Paranoid" de Black Sabbath. Y siguiendo con la tradición de las portadas de broma, la de este disco es otra foto altamente procesada de... un ano. De Peter Steele según reza la leyenda, aunque como se ha apuntado en algún minuto en alguna otra parte, "todos los anos se parecen".


Ya desde este punto, Type O Negative estaba exhibiendo la clase de humor bizarro que se transformaría en tópico de la banda. Una característica de las letras de la banda es su negativa al compromiso: a ratos pueden ser muy poéticas, suaves o líricas, casi implorando que no le rompan el frágil corazón al letrista, y en otros momentos pueden ser muy áridas y agresivas. La música es otro tanto, y muchas veces funciona como deconstrucción de tópicos dentro del metal. De ahí que ésta pueda oscilar violentamente entre el Doom Metal más lento y macabro por una parte, y el Punk más duro y agresivo por la otra. Por supuesto que esto implica que la calidad de la música de Type O Negative no siempre se mantiene arriba, pero eso no importa: el punto es mofarse un poco de la extrema seriedad con la que los fanáticos del metal suelen tomarse su música, deconstruyéndola y reconstruyéndola a su soberano antojo. Esto no quiere decir que sean malos músicos o que sus discos sean indigestos. Por el contrario, gracias a que Type O Negative está integrado por muy buenos músicos, es que la banda funciona más allá de la broma.


Después en 1993 vino "Bloody Kisses", el disco que los consagró, y el mejor de su discografía. En este disco, la mezcla de Doom, Goth y Punk se ha macerado lo suficiente como para hilvanarse en un disco excelente de principio a fin. Algunas canciones sueltas son himnos de la banda, pero otras funcionan únicamente en función del conjunto. Esto en una banda cualquiera sería un demérito, pero tratándose de la ironía de Type O Negative, probablemente es a propósito. Y el disco en su conjunto es muy bueno, además. El cover esta vez es de un antiguo tema semifolk llamado "Summer Breeze", de Seals and Crofts. La canción tuvo el éxito suficiente como para incluso abrirse paso hasta la secuencia de créditos de la película "Sé lo que hicieron el verano pasado". Existen dos versiones del disco, una con los interludios instrumentales y otra sin ellos. Para cualquier fanático, o para cualquiera que se adentre en Type O Negative por lo demás, es indispensable la versión CON los interludios, que hacen redondo el disco como un todo.

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